Erasmo de Rotterdam: Triunfo y tragedia de un humanista<\/a><\/strong><\/em>:<\/p>\n\n\n\nI. Misi\u00f3n y sentido de la vida.<\/h4>\n\n\n\n Se presentan, como gu\u00edas, los principales valores que regir\u00e1n la vida del humanista, as\u00ed como aspectos personales que dar\u00e1n origen al personaje.<\/p>\n\n\n\n
II. Ojeada a la \u00e9poca.<\/h4>\n\n\n\n Es mostrado el contexto cultural de la \u00e9poca, en cuanto al pensamiento y la raz\u00f3n. Un renacimiento en todas las artes de Europa.<\/p>\n\n\n\n
III. Juventud oscura.<\/h4>\n\n\n\n El autor comienza, de manera formal, con la historia personal de Erasmo.<\/p>\n\n\n\n
IV. Retrato.<\/h4>\n\n\n\n Se toman en cuenta a los artistas implicados en la vida del humanista, as\u00ed como un acercamiento fision\u00f3mico a la personalidad de Erasmo por medio de los retratos legados por Durero y Holbein. Erasmo comienza a ganar popularidad con sus escritos.<\/p>\n\n\n\n
V. Grandeza y l\u00edmites del humanismo.<\/h4>\n\n\n\n Erasmo ha alcanzado una notable popularidad entre los c\u00edrculos entendidos. Los nobles buscan su consejo. El autor aborda los principales fundamentos del pensamiento humanista como una inteligencia universal.<\/p>\n\n\n\n
VI. El gran adversario.<\/h4>\n\n\n\n Se presenta en el escenario hist\u00f3rico, el fraile agustino que servir\u00e1 como detonante de un movimiento inspirado por los ideales de Erasmo, mas desvirtuado por el mismo fanatismo. La reforma protestante.<\/p>\n\n\n\n
VII. La lucha por la independencia.<\/h4>\n\n\n\n Ambos bandos presionan por la adici\u00f3n de Erasmo entre sus filas, pues se ha vuelto determinante para el \u00e9xito de ambos partidos (cat\u00f3lico y protestante). Mas, el roterodamo sigue firme en su convicci\u00f3n de libertad.<\/p>\n\n\n\n
VIII. La gran disputa.<\/h4>\n\n\n\n Las raudas extremidades de la Reforma protestante se posan directamente sobre la imparcialidad de Erasmo. Enfrentamiento que toma forma en un intercambio de misivas entre el humanista y Lutero.<\/p>\n\n\n\n
IX. El fin.<\/h4>\n\n\n\n El autor remarca la bifurcaci\u00f3n entre el pensamiento protestante y la \u00faltima derrota erasmista. Tomando lugar el decisivo edicto de Augsburgo, en el remanente colectivo de una Europa saqueada por el fanatismo.<\/p>\n\n\n\n
X. El legado de Erasmo.<\/h4>\n\n\n\n El autor explica c\u00f3mo, a pesar de parecer olvidado, el supremo fin de conocimiento universal erasmista es recogido por personajes posteriores al humanista.<\/p>\n\n\n\n
Opini\u00f3n personal<\/strong><\/span><\/h2>\n\n\n\nEn un momento en que el fanatismo, de cualquier tipo, se vuelve regente de toda una generaci\u00f3n europea, llev\u00e1ndola de la mano por un sendero l\u00f3brego, las voces cl\u00e1sicas se escuchan con el d\u00e9bil eco de un idioma casi olvidado por el pueblo. Pero tales vocablos hablan directamente a un hombre; al humanista que vio, en tiempos de omnipresente ignorancia y abuso por parte de la \u00fanica autoridad religiosa, una oportunidad de evoluci\u00f3n en el sendero de la virtud; un progreso casi on\u00edrico que, de haber sido entendido, habr\u00eda generado que la humanidad se codeara con musas y dioses. Erasmo no desprecia al vulgus profanum<\/em>, sino que censura el ciego af\u00e1n que les impide contemplar su verdadera esencia. Esencia que Erasmo conoci\u00f3 y volvi\u00f3 p\u00fablica bajo el disfraz de la s\u00e1tira y la elegante elocuencia, ante un verdugo tuerto que, sin miramientos ni preguntas, alimentaba una profana llama, gusto de herejes y disidentes. Mas la causa erasmista no muri\u00f3 en Basilea. Un suspiro qued\u00f3 suspendido en el aire, el aire de las \u00e9pocas, hablando a Montaigne, Spinoza, Kant, o a cualquier individuo espiritual. Como los cl\u00e1sicos hablaron a un imberbe en las bibliotecas de Steyn, as\u00ed nos habla Erasmo a trav\u00e9s de los tiempos. Con la esperanza de una mejor humanidad.<\/p>\n\n\n\nPublico recomendado<\/strong><\/span><\/h2>\n\n\n\nAcad\u00e9micos y p\u00fablico en general. Especialmente interesante para quienes busquen profundizar en las ideas y contextos que detonaron uno de los movimientos en Europa m\u00e1s importantes del siglo XVI, desde la perspectiva del humanismo.<\/p>\n\n\n\n
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